Actualmente son más  y más los profesionales de distintas áreas que prefieren comenzar un camino laboral por su cuenta. Por eso, queremos presentarte los mejores consejos para mejorar tu productividad como Freelancer.

Es cierto que trabajar desde casa es una de las mejores formas de ejercer tus labores: libertad de horario, no tienes que trasladarte a una oficina, eres “tu propio jefe” y sobre todo, no tenemos que usar uniformes. Sin embargo, no todo es tan sencillo como parece.

Así como tenemos miles de cosas entrañables, también tenemos que estar atentos a diferentes factores que pueden afectar nuestra productividad: el ocio, distracciones, factores externos y demás elementos que hay que tener en cuenta en todo momento.

Como te comentaba, trabajar desde tu oficina en casa es maravilloso, todo hasta que tienes un vecino con complejo de constructor que decide construir un transbordador espacial y hace uso de todas las herramientas existentes (de las más ruidosas, cabe destacar).

Cuando laboramos por nuestra cuenta, nosotros somos nuestro peor enemigo. Ya que al no contar con una supervisión directa y ciertas presiones que sí tenemos en una oficina real, podemos perder el hilo de nuestras labores.

Así que no te preocupes, aquí te traemos los mejores consejos para mejorar tu productividad como freelancer y no morir en el intento. ¿Estás listo? Toma nota y comencemos.

Los mejores consejos para mejorar tu productividad como freelancer

Comienza temprano y haz de cuentas que vas a la oficina: Comenzar la rutina con una transición de la almohada a tu escritorio puede ser complicada. Sobre todo si estás  acostumbrado al viaje desde casa a la oficina que te ayuda a despertar.

Por ello, sigue tu rutina como si fueses a la oficina, eso te ayudará a ser más productivo, Programa tu despertador, prepara café, dúchate y vístete de comodidad. Organízate y distribuye tus tareas como un día cualquiera de oficina, pero en casa.

– La organización es clave: Recuerda que en casa eres tu propio jefe. Distribuye tus actividades en el día, programa, planifica y ejecuta de forma ordenada. Sobre todo si tienes reuniones o compromisos. Así mantendrás siempre la brújula de todo.

-Tu espacio de trabajo: dentro y fuera de él: Un error muy común al trabajar desde casa, es que cualquier lugar se puede convertir en un puesto de trabajo. Lo mejor es asignar una habitación o espacio solo para ello.

Acondiciona un espacio para tu trabajo, en el que sientas cómodo/a y puedas ejecutar tus labores tranquilamente y sin distracciones (algo que hablaremos luego). Ahora, si no cuentas con un lugar como tal en tu casa, no te preocupes.

En muchos casos, no resulta práctico o cómodo realizar las tareas dentro de casa por no contar con un espacio adecuado. Sal, ve a un café, biblioteca o lugar público (y seguro) donde puedas disfrutar de una conexión a Internet y poder trabajar tranquilamente.

Además, existen muchos lugares de co-working pensados precisamente para personas con esas situaciones, que pueden ayudarte a mantener la productividad aún sin estar en una oficina real.

-Las redes sociales, pueden ser tu enemigo: Sabemos que es algo complicado, siendo honestos a todos no ocurre. Iniciamos sesión en nuestro navegador y lo primero que nos aparece son nuestros perfiles de redes sociales y corremos a verlos.

Esto, quizás pienses que  por verlos cinco minutos no afecte en nada a tu productividad, pero nada más alejado a la realidad. Éstas son una gran distracción para nuestras labores diarias.

Lo mejor que puedes hacer es cerrar las sesiones en todas las rede sociales. Así evitarás que éstas aparezcan salvajemente en nuestras pantallas para robarnos la concentración. Y sin trampas, mantente alejado de ellas en tu móvil, eso no vale.

-No te conformes, siempre busca más: Todos los proyectos duran generalmente un poco más de lo que estimamos debido a diferentes factores. Sin embargo, eso no te debe quitar la posibilidad de cumplir con más cosas durante el día.

Exígete  más cada día, cumple con más asignaciones, sé más realista y al final de la jornada, terminarás con más asignaciones completadas de forma satisfactoria y verás que bien se siente.

-Explota tu motivación: Hay que recordar que somos humanos, no máquinas. Por ende, durante el día nuestra motivación puede variar y con ella nuestra productividad. Pero puedes trabajar en ello.

Aprovecha al máximo los momentos en donde tienes el tope de tu energía y concentración para desarrollar las actividades más complejas. Así lograrás alcanzar esos “pequeños éxitos” y conseguir excelentes resultados.

-¡Concéntrate!: Sí, tranquilo que no te estamos regañando, solo queremos que tomes esto en consideración de la mejor manera. Mantenerte ocupado ayuda a tu productividad. Está comprobado que una persona mientras más ocupada está, más productiva es.

Por ello, mantente siempre en movimiento. Céntrate en una actividad que te ayude a mantener el ritmo para cumplir con todo, así estarás siempre con energías de hacerlo todo.

-Planificate con tiempo: El tiempo puede ser tu mejor aliado o tu peor enemigo. Sin embargo, si te planificas puedes tenerlo a tu favor. Planifica una lista de tareas diarias con anticipación, no dediques mucho tiempo de última hora a ellas.

Cambia tu agenda cuando sea necesario pero respetando siempre tus actividades programadas. Procura no dejar nada del día anterior, esto solo frenará tu día, ya que deberás remar contra corriente arrastrando un peso antiguo.

-La tecnología es tu mejor aliado: Sin importar la actividad que vayas a desarrollar, siempre necesitarás estar conectado con demás personas y colegas. Las apps de  mensajería, organizadores y demás herramientas para la productividad serán tu mejor aliado para mantener los flujos de trabajo.

-La música es un excelente acompañante: No importa cuál sea tu gusto, la música siempre te ayudará a encontrar el equilibrio que necesitas, además de brindarte energía y motivación.

Una excelente opción para escuchar, son las playlist para videojuegos. Aunque suene extraño, esta música está diseñada para que mantengas la concentración, lo cual puede ser muy beneficioso para tu trabajo.

-Toma un descanso, lo necesitarás: Como mencionamos anteriormente, no eres un robot. Dedica un tiempo para cocinar, distraerte y aprovechar pequeños momentos para ti, despejar la mente y recargar energías.

No cometas el error de parar el trabajo y abrir YouTube o ver una serie, aléjate de la computadora o escritorio. Toma algo de aire fresco, conversa con alguien o simplemente toma un café sentado en un sillón.

-Decide cuando parar: Así como es importante que comiences el día como si fuese a la oficina, con una rutina y bien temprano, es importante decidir cuándo vas a parar tu rutina.

Al estar en casa, tenemos la ventaja de no contar con horarios para trabajar y estando concentrados en las labores, podemos perder la noción del tiempo. En una oficina tus compañeros te advertían la hora  de salir, en casa eso no ocurrirá.

Propón una hora de terminar tu jornada, así plantear todas tus asignaciones hasta esa hora y respétala. Solo así, podrás luego descansar y recargar las energías para el próximo día.

¿Eres freelancer actualmente o estás contemplando la idea de comenzar? Acá te dejamos nuestros mejores consejos para que inicies con buen pie un camino exitoso. ¿Qué otro aspecto considerarías necesario para trabajar desde casa?

Por otra parte, ¿qué prefieres para trabajar? ¿Eres de los que prefieres ir a una oficina y tener una rutina laboral o prefieres estar por tu cuenta y tener una vida laboral independiente? Déjanos tu opinión en los comentarios.